No es ningún secreto que cada vez lo hacemos mejor al volante, la verdad es que es un consuelo saber que aunque no son cifras para dar saltos, cada vez provocamos y tenemos menos accidentes de circulación. La verdad es que creo que es algo que a todos nos gusta escucha en el telediario, mientras  cenamos en familia un día cualquiera, la señorita que da las noticias nos dice que este mes ha habido algunos accidentes menos.

Y es que hacer las cosas bien tienen muchas satisfacciones, controlar la velocidad, utilizar los cinturones, respetar las normas y las señales como ceder el paso o realizar una parada cuando es necesario puede salvar tu vida y la de los demás.

La mejor manera de ver los efectos de un accidente es la de visitar por ejemplo un desguace, en el siguiente enlace podrás encontrar algunos de los estragos que hacen los accidentes en los coches ya que aquí es a donde llevan los coches siniestrados con el fin de dar otra oportunidad a las piezas que pueden ser recicladas, una manera de usar piezas de segunda mano en otros coches con la garantía de que son piezas garantizadas ya que van revisadas por profesionales.

A mí siempre me ha dado mucho miedo la carretera, más que miedo lo que me da es respeto, saber que vamos en una máquina que en la que por una imprudencia o una negligencia de otra persona podemos perder la vida, y no solo nosotros sino todos los que nos acompañan o van en otros vehículos. Debe de ser muy difícil de superar el haber tenido un accidente en el que haya habido víctimas mortales, saberse culpable de la muerte de alguien, o de las secuelas que puedan causar tus actos, provocar un accidente por encender un cigarrillo o por cambiar de emisora o un simple despiste pude cambiar radicalmente la vida de los que te rodean y la tuya propia.

En la carretera con los cinco sentidos, sin distracciones, sin excusas, descansando bien y estando atento a todo. No te la juegues por nada, respeta las normas, las señales y los avisos, se prudente, no cometas un acto que puede pasar una factura demasiado elevada, se consciente de que vas en un vehículo y respeta a los demás, su vida y la tuya, la de todos, es lo único que tenemos.